Por: Víctor Muñoz | Director comercial en IT Adviser
Medición del factor de potencia, clave para optimizar el recurso energético
La medición del factor de potencia (FP) es considerado como un indicador sobre el correcto aprovechamiento de la energía. Las cargas inductivas como motores, balastros, transformadores, etc., son el origen del bajo factor de potencia ya que son cargas no lineales que contaminan la red eléctrica, en este tipo de equipos el consumo de corriente se desfasa con relación al voltaje lo que provoca un bajo factor de potencia.
El factor de potencia puede tomar valores entre 0 y 1, donde 1 es el valor ideal e indica que toda la energía consumida por los aparatos ha sido transformada en trabajo. Las instalaciones eléctricas que operan con un factor de potencia menor a 1.0, afectan a la red eléctrica tanto en alta tensión como en baja tensión, además, tiene las siguientes consecuencias:
1.- Incremento de las pérdidas por efecto joule
- Calentamiento de cables
- Calentamiento de embobinados de los transformadores de distribución, y
- Disparo sin causa aparente de los dispositivos de protección
2.- Sobrecarga de los generadores, transformadores y líneas de distribución.
3.- Aumento de la caída de tensión.
4.- Incremento en la facturación eléctrica
Considerando lo anterior, el factor de potencia por debajo del 0.90 indica la existencia de energía desperdiciada y, en consecuencia, un incremento innecesario en el importe de su facturación eléctrica por este concepto.
De acuerdo al comportamiento del factor de potencia, se aplica una penalización cuando el FP es menor al 0.90 o una bonificación cuando el FP es mayor al 0.90 conforme a lo establecido por el suministrador de energía eléctrica.
Adicional a mitigar los efectos de mala calidad de energía la finalidad de corregir el factor de potencia es reducir o aún eliminar el costo de energía reactiva en la factura de electricidad. Para lograr esto, es necesario distribuir unidades capacitivas, dependiendo de su utilización, en el lado del usuario del medidor de potencia y en general distribuidos en el sistema eléctrico de sus instalaciones. Existen varios métodos para corregir o mejorar el factor de potencia, entre los que destacan la instalación de capacitores eléctricos o bien, la aplicación de motores sincrónicos que finalmente actúan como capacitores.
Algunas técnicas de ingeniería sobre compensación de factor de potencia son:
- Compensación individual en motores.
- Compensación por grupo de cargas.
- Compensación centralizada.
- Compensación combinada.
Es necesario realizar un estudio previo a la implementación de una solución de compensación del factor de potencia para determinar las implicaciones en cuanto a calidad y de facturación de energía eléctrica; IT Adviser Infraestructura Tecnológica cuenta con equipo de medición y personal de ingeniería con el fin de identificar las oportunidades y soluciones que se adapte mejor su instalación.
En conclusión, la medición del factor de potencia es esencial para asegurar el uso eficiente de la energía eléctrica en cualquier instalación. No solo permite identificar áreas de mejora en el consumo energético, sino que también ayuda a reducir costos operativos y minimizar el impacto ambiental. Implementar una adecuada medición y corrección del factor de potencia contribuye a un sistema eléctrico más confiable y sustentable, beneficiando tanto a las empresas como al medio ambiente. Por ello, es crucial realizar una evaluación constante y precisa de este importante indicador energético.